En el competitivo mundo empresarial de hoy, una estrategia de branding efectiva es más crucial que nunca. No se trata solo de tener un logotipo llamativo o un eslogan pegajoso, sino de construir una identidad de marca que resuene profundamente con tu audiencia objetivo.
En este artículo, vamos a explorar cómo una estrategia de branding bien elaborada puede transformar tu negocio, incrementar tu visibilidad y fomentar una conexión duradera con tus clientes.
Desmitificando el branding: Más allá de «un logo»
Lo primero que debes saber es que, a pesar de la creencia popular, el término branding no hace alusión únicamente a un logotipo o a la identidad visual de una marca. El branding tiene dos aristas que se complementan:
La primera arista es el concepto e identidad de la marca. Esto incluye la visión y misión, el propósito y la dirección de tu empresa; los valores, que son los principios fundamentales que guían todas tus acciones y decisiones; la propuesta de valor, que diferencia a tu marca de la competencia; y la filosofía, que representa la cultura y el enfoque único que tu marca aporta al mercado. En función a todos estos y otros aspectos conceptuales y abstractos, se desarrolla la segunda arista: la identidad visual de la marca.
La identidad visual abarca la creación de un logotipo y la elección de una paleta de colores que refleje la esencia de tu marca, así como la selección de fuentes y estilos visuales que complementen la identidad de tu marca, entre otros aspectos gráficos.
Es importante entender que sin lo primero, lo segundo no estará fundamentado sobre ningún pilar, y por tanto, no tendrá una verdadera conexión con la marca.
El mayor error que podemos cometer en branding es trabajar sin un concepto de marca claro, sin una visión y sin un propósito.
Un aspecto clave en la estrategia de branding de una marca tiene que ver con su personalidad. La personalidad de una marca viene siendo realmente lo mismo que la personalidad de una persona. Es decir, es aquello que la hace única, que la hace especial. Su forma de ser, su forma de comunicarse, su forma de comportarse, su manera de actuar, y su manera de conducirse ante los demás.Cuando estudiamos branding en la universidad, los ejemplos que siempre solemos manejar son los de las grandes marcas como Coca-Cola o Apple. Sin embargo, aterricemos un poquito más. Pensemos en esas marcas regionales o nacionales que conocemos. No necesariamente las marcas más grandes a nivel de presupuestos, pero quizás esas marcas que han conectado con nosotros, de las cuales somos fans, que seguimos en redes sociales. Las marcas que generan esa conexión con nosotros, llamadas en la jerga de marketing, «lovemarks», normalmente tienen en común que tienen una personalidad completamente definida y un diferenciador muy claro.
Claridad en el negocio: La base de un branding sólido.
Un aspecto crucial al emprender un proyecto de branding es tener claridad sobre el negocio. Uno error común es abordar el branding exclusivamente desde una perspectiva de marketing, percibiéndolo solo como un proceso artístico y creativo. Sin embargo, en la mayoría de los casos, detrás de una marca hay un negocio o una actividad productiva. Por esto, es vital tener claridad sobre el negocio antes de emprender un proyecto de branding para que todos los aspectos conceptuales vayan de la mano.
Todo está entrelazado; branding y negocio deben apuntar hacia un mismo objetivo.
La Extensión del branding: Más allá de lo visual.
A veces también somos muy limitados en nuestro entendimiento de qué es el branding. Y aun cuando sabemos que el concepto de la marca es parte del branding, pensamos que la aplicación de esto tiene que ver solamente con un logo, unos colores y unas tipografías. Sin embargo, el branding es muchísimo más extenso.
Cuando hablamos de branding, también hay aspectos que entran en juego, como nuestra cultura organizacional. De la filosofía de la marca se desprenderá cómo es esa cultura organizacional, cómo es la selección del personal que hacemos, incluso cómo ese personal debe vestir y tratar a los clientes.
El branding también tiene su aplicación en cómo será la decoración y ambientación del local, o en el caso de un negocio online, cómo será su customer journey.
En general, un proceso de branding bien hecho es realmente amplio y extenso. Pero es un proceso que también se debe hacer a la medida y a la necesidad de cada cliente y de cada marca. Hay casos de marcas que deciden empezar de menos a más y esto es un abordaje completamente funcional.
Elementos clave de una estrategia de branding efectiva.
Como hemos podido ver, el branding es todo un mundo y ciertamente una de las áreas más apasionantes dentro del marketing. En función a todo lo que hemos planteado, aquí te dejamos un resumen de los aspectos clave que debes considerar al momento de hacer un branding:
1. Investigación y Análisis del Mercado: Es esencial entender a tu audiencia, analizar a tus competidores y evaluar la situación y las tendencias de la industria.
2. Definición de la Identidad de Marca: Clarificar la misión y visión, propuesta de valor, establecer los valores fundamentales y determinar el tono y la voz de tu marca.
3. Diseño de los Elementos Visuales: Crear un logotipo memorable, reconocible, adaptable y con todas sus variantes , elegir una paleta de colores adecuada, seleccionar fuentes y estilos visuales que complementen la identidad de tu marca y desarrollar sus aplicaciones gráficas.
4. Consistencia en Todos los Canales: Asegurarte de que todos los elementos de tu marca sean coherentes en todos los canales y puntos de contacto, desde tu sitio web y redes sociales hasta tus materiales de marketing, ambientación y atención al cliente.
Construir una estrategia de branding efectiva no solo distingue a tu negocio de la competencia, sino que también crea una conexión emocional con tu audiencia.
En 3yMedia Publicidad, nos especializamos en construir marcas que no solo destacan, sino que también dejan una impresión duradera. Si estás listo para transformar tu negocio a través de una estrategia de branding poderosa, aquí estamos para atenderte.
Rebeca Sulbaran Bromberg.
Directora de Operaciones.
